La degradación del fondo de algunos ibones del Pirineo y el desarrollo de sensores de color en los envases para advertir de la caducidad del alimento, ejes de las charlas Unizar Kids 2025 en Zaragoza
La iniciativa ha contado con alumnado de los colegios Tenerías, Mercedarias, San Antonio de Padua, Zaragoza Schoolhouse, San Vicente de Paúl, Agustinos, Las Fuentes, Joaquín Costa y Ciudad de Zaragoza

(Zaragoza, jueves, 12 de junio de 2025). La degradación del fondo de algunos ibones del Pirineo y el desarrollo de sensores de color en los envases para advertir de la caducidad del alimento han centrado las dos charlas con que hoy ha arrancado en la Universidad de Zaragoza la séptima edición de Unizar Kids: cómo será la vida en 2075 y en las que han participado cerca de 600 alumnos de 5º y 6º de Primaria de los colegios Tenerías, Mercedarias, San Antonio de Padua, Zaragoza Schoolhouse, San Vicente de Paúl, Agustinos, Las Fuentes, Joaquín Costa y Ciudad de Zaragoza.
La iniciativa continuará la próxima semana en los campus universitarios de Teruel (martes 17) y de Huesca (miércoles, 18). El objetivo es que a través de seis charlas a lo largo de tres días, cerca de 1.200 escolares de 5º y 6º de Primaria entren a las dependencias universitarias y conversen de tú a tú con el personal científico para reflexionar cómo la ciencia, el conocimiento y la tecnología habrán cambiado y mejorado o no nuestras vidas y las de estos escolares de 10 y 11 años en el 2075, cuando tengan alrededor de 60 años. En esta edición, los temas previstos permitirán analizar cómo serán en el futuro los recipientes, los veranos, las granjas, los lagos del Pirineo, el Universo y la producción para alimentar a todo el planeta.
La primera de las estas tres jornadas ha tenido lugar hoy en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, donde la vicerrectora de Política Científica, Pilar Pina, ha dado la bienvenida al primer grupo, con 275 alumnos. La primera charla ha permitido ahondar en la evolución de los ibones del Pirineo (10:00h), de la mano del profesor Alfonso Pardo, del Área de Didáctica de las Ciencias Experimentales Unizar, geólogo e instructor de buceo CMAS-FEDAS, mientras que la segunda ha incidido en los envases alimentarios del futuro (11:10h), a cargo deCristina Nerín de la Puerta, catedrática de Química Analítica en la EINA, investigadora en el I3A Unizar.
(Información ampliada sobre las charlas y los ponentes en los tres campus).
La actividad de divulgación científica Unizar Kids “Cómo será la vida en 2075” busca sembrar la semilla de la curiosidad y el interés por lo que nos rodea desde edades tempranas, poner en valor el trabajo científico del campus público aragonés y acercarlo a la población escolar, además de crear interés y vocaciones científicas en niñas y niños.
Unizar Kids es una actividad organizada por la Unidad de Cultura Científica de la Universidad de Zaragoza, en colaboración con el Departamento de Innovación Educativa de la Consejería de Educación del Gobierno de Aragón y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Se enmarca dentro de la iniciativa "Researchers at Schools", como pre- evento del proyecto de la Noche Europea de los investigadores e investigadoras “G9-SCIENCE4ALL”, financiado por la Unión Europea dentro del programa Horizonte Europa: Programa Marco de Investigación e Innovación, bajo el acuerdo de subvención nº 101162477.
En su charla, "Los secretos de los ibones: ¿cómo serán los lagos del Pirineo en el 2075? ¿Cómo protegeremos los lagos de montaña, su agua cristalina y la vida que esconden?", el geólogo Alfonso Pardo ha subrayado el papel de los ibones, lagos de origen glaciar situados en los circos de montaña, como testigos silenciosos del pasado y del futuro de nuestros ecosistemas pirenaicos. De la mano del minidocumental Montañas de agua ¿qué está pasando con los ibones?, que revela la degradación del fondo de algunos ibones del Pirineo, el investigador ha señalado “el impacto significativo de la acción humana en estos ecosistemas acuáticos de alta montaña. La actividad humana, como el turismo y la introducción de especies exóticas, está afectando la composición de los ibones, su biodiversidad y el futuro de estos lagos glaciares”.
Estos lagos de alta montaña se formaron hace miles de años, al final de la última glaciación, cuando el hielo se retiró y dejó tras de sí huecos que se llenaron con agua. Son tan puros que sus aguas se consideran las más limpias de todos los ecosistemas de montaña y de las redes de ríos. “En ellos viven especies únicas, algunas que no se encuentran en ningún otro lugar del planeta, adaptadas a las duras condiciones del frío y la altitud. Pero los ibones también cambian con el tiempo: poco a poco se van llenando de sedimentos y acaban transformándose en turberas y prados”, ha explicado.
Alfonso Pardo es geólogo, doctorado por la Universidad de Princeton (EE. UU.) y licenciado en Ciencias Geológicas por la Universidad de Zaragoza. Buceador desde 1984 e instructor CMAS-FEDAS desde 1994. Pardo ha desarrollado una destacada labor científica y divulgadora, con más de 200 artículos publicados en revistas especializadas y medios de comunicación, tanto nacionales como internacionales.
Entre sus líneas de investigación destaca el estudio medioambiental de los ibones del Pirineo oscense, en los que ha liderado las primeras campañas de muestreo subacuático realizadas en esta cordillera. Junto a otros miembros de su equipo, ostenta el récord de España de buceo en altitud, alcanzado en el ibón Helado, a 3.000 metros de altitud. Además de su trabajo científico, ha escrito relatos de ficción —algunos premiados— y es autor de un guion cinematográfico y otro documental “Montañas de agua” por el que recibió la Mención Honorífica XXVII convocatoria Prismas "Casa de las Ciencias" a la Divulgación.
La segunda charla de hoy ha analizado cómo serán los envases alimentarios en el futuro. Bajo el título ¡Cuidado, este zumo ha caducado! Envases que piensan por ti. Los recipientes del futuro hablarán con nosotros para proteger nuestra salud, Cristina Nerín de la Puerta, catedrática de Química Analítica en la EINA, investigadora en el I3A Unizar, ha acercado los resultados de sus investigaciones a 250 alumnos de Primaria de los colegios San Antonio de Padua, Las Fuentes, Joaquín Costa, Ciudad de Zaragoza y Agustinos.
Durante la sesión, Cristina Nerín ha indicado en cómo son nuestros envases de alimentos y cómo serán en el futuro, indicando que existen numerosos materiales de envase, no sólo plásticos, y todos ellos pretenden proteger el alimento de contaminaciones externas y alargar la vida útil. “No hay nada eterno y al final caducan. ¿Cómo saber cuándo no podemos comerlos?”, y ha aludido al papel futuro que van a poder desarrollar los sensores de color que indican la caducidad del alimento.
Cristina Nerín es catedrática de Química Analítica en la Escuela de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de Zaragoza, con toda una dilatada trayectoria dedicada a la investigación y la enseñanza de la Química y la Química Analítica. “Empecé estudiando los contaminantes en el medio ambiente y posteriormente me fascinó el saber que todos los plásticos que se empleaban para envasar alimentos transferían sustancias al producto envasado. Es decir, comíamos en nuestra dieta sustancias que venían de los plásticos. Empecé a estudiar a fondo este problema y sigo en la actualidad. Se ha avanzado muchísimo y los materiales, incluidos los plásticos, han mejorado también mucho. Hay legislación que prohíbe muchas sustancias y cada vez hay más controles. Además, hemos desarrollado materiales que protegen el producto envasado frente a procesos de oxidación (ranciedad) y crecimiento de bacterias. Nuestro grupo de Investigación trabaja en este campo”, ha afirmado.
Cuenta con numerosos proyectos de investigación y su grupo de investigación está considerado a escala europea e internacional como grupo de referencia en el estudio de materiales de envase para alimentos. Ha formado parte de la Agencia de Seguridad Alimentaria Europea (EFSA), del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) y es miembro de la Task Force de Envase en ILSI (International Life Science Institut). Ha publicado más de 450 publicaciones científicas de primer nivel y ha formado a 43 doctores y a cientos de estudiantes.